viernes, 20 de abril de 2012

Stewie


Bajé del coche junto a los amigos de mi prima y mis padres. Estábamos en la finca. Y Stewie esperándonos en la puerta de la misma. Da igual que lleve gafas y el pelo tintado o que lleve 5 meses sin verle. Él reconoce quién soy con sólo decirle su nombre. Nada más bajar dije, Stewieeeeeeee y el empezó a volverse loco por dentro. Mi padre abrió la puerta. Corriendo se dirigió a mí para que le pegara un buen achuchón. No existía, en ese momento, para él, otra persona en el medio. Me encanta como salta después de achucharlo y hartarme de acariciarlo. Seguimos dentro de la finca enseñándoles a los amigos la casa que tenemos y tal. Y nada él ahí todo el rato encima mío para recibir otra carantoña de vez en cuando. Algún lametazo en la mano. A veces salía de casa para correr con él o achucharle. Repetir mil veces su nombre. Y que se emocione saltando, brincando o corriendo. Un animal te puede dar más que un ser un humano. Pasé lo que pasé siempre está ahí para darte cariño :)


2 comentarios:

  1. Lo siento, pero como Piwi ninguno...

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  2. ¡Yo también soy más de Stetwie! Y cómo se acerca con la cabeza agachada y con cuidado cuando lo llamas desde la piscina porque sabe que está haciendo mal.

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